Tengo un par de Renos

10.5.07

CANDY, CANDY

Hace ya algo más de un año que comparto mi vida con alguien. Se llama Candy. Y no. No es mi pareja. Tampoco mi amiga. Pero lo cierto es que vivimos juntos. Normalmente llevamos nuestra existencia conjunta en paz y armonía. Aunque a ratos Candy se vuelve un poco rebelde, agresiva y no para de tocar los cojones. Pero se le pasa rápido. Porque ella es así. De impulsos. Y he de reconocer que yo tengo parte de culpa. Porque a veces soy yo el que le toca los cojones a ella. Pero a pesar de todo nos llevamos muy bien. Nos hemos cogido cariño

Nunca creí que alguien pudiera llamarse Candy. Bueno, excepto aquella niña de ojos tremendamente desproporcionados, nariz respingona a lo Rociíto y dos coletos rubios, que hizo las delicias de todas las mozas de mi generación. Sí. La mítica "Candy, Candy". Aquella con la que lloramos a moco tendido (vale, reconozco que era fiel seguidor) cuando su amado Anthony muere al caerse de un caballo. Snif, snif. Que recuerdos...



Pero por esas cosas que tiene la vida, un buen día conocí a una Candy. Una de verdad. Y como siempre pasa con las cosas que acaban siendo importantes, sucedió por casualidad. Nuestro primer encuentro tuvo lugar en la consulta de una fisioterapéuta. Fue ella quien nos presentó. Y enseguida congeniamos. Por aquel entonces ella estaba perdida. Algo descontrolada. Pero con el tiempo se fue calmando. Hasta llegar al punto en el que nos encontramos hoy. Ella vive placidamente en mi intestino. Yo la cuido para que esté tranquilita.

Gracias a mi Candy, aunque su nombre completo es candida albicans (ella, que siempre fue muy chic y quiso dedicarse al cine), he conocido uno de los grandes descubrimientos de los japoneses. Sí, mi Candy es un bichito que llevo en mi interior. A lo Aliens. Y a quien le moleste, pues que se la pique un pollo. Bueno, a lo que iba. Gracias a mi cosita he descubierto las grandes bondades de la chlorella.




La chlorella es un alga de agua dulce minúscula, del tamaño de un glóbulo rojo. Es decir, muy pequeña. Pequeñísima. Es esférica, unicelular y de color verde. Y se cree que es uno de los primeros organismos vivos que habitó la Tierra. Aunque ha vivido entre nosotros 600 millones de años, no fue descubierta hasta el año 1890 por el microbiólogo holandés M. W. Beijernick. Desde entonces, numerosos estudios se han realizado sobre sus beneficios para la salud. Casi todos japoneses, que por algo son los que más algas comen. ¿Será por eso que tienen esa cara de estreñidos?

La cuestión es que esta pequeña alguita es alucinante. Te arregla casi cualquier dolencia. Y no te arregla los problemas de dinero de purita casualidad. Yo la tomo desde hace algún tiempo y me va fenomenal, la verdad. Los japoneses, principales productores de este pequeño milagro verde, la cultivan en cantidades ingentes y la toman como si de pipas y caramelos se tratase. He aquí sus virtudes.




Entre sus propiedades terapéuticas, la chlorella es:
-Alcalinizante
-Antialérgica
-Antibacteriana
-Anticancerígena
-Anticatarral
-Antidepresiva
-Antienvejecimiento
-Antioxidante
-Antitumoral
-Antivírica
-Cardioprotectora
-Cicatrizante
-Depurativa
-Desintoxicante
-Desodorante
-Digestiva
-Elimina el sangrado de encías
-Estimula el crecimiento de niños
-Estimula el hígado
-Hipocolesterolemiante
-Inmunoestimulante
-Funguicida
-Mejora la respiración
-Potenciadora del rendimiento físico
-Purificadora
-Reconstituyente
-Regeneradora de células y tejidos
-Reguladora de la presión sanguínea
-Tónica


Actualmente el alga chlorella se emplea para:
-Alergias
-Anemia
-Artritis
-Cáncer
-Candidiasis
-Depresión
-Dolencias gástricas
-Estreñimiento
-Fibromialgia
-Gingivitis
-Gripe
-Halitosis
-Heridas
-Hipertensión
-Infecciones en general
-Intoxicación por metales pesados
-Pancreatitis
-Perdida de memoria
-Piorrea
-Problemas intestinales
-Quemaduras
-Resfriados
-Síndrome de fatiga crónica
-Síntomas de menopausia
-Úlceras dérmicas
-Úlceras estomacales


¿Cómo se os ha quedado el cuerpo? La cholrella es el alga de la eterna juventud. Así estoy yo, que parezco un teenager.
House tiembla, que se te acaba el curro...

Etiquetas:

6 Comments:

At 23:22, Blogger Raquel Ritz said...

¿De verdad?
Pues a mí me iría de perlas para unas 4 cosas de tu lista. ¿Te la tienen que recetar o puedes tomarla libremente?
¡Qué interesante!

 
At 01:13, Blogger Niño Voltio said...

Hola Raquel.

La puedes comprar sin ningún tipo de receta. Pídela en cualquier herboristería y te la traeran en un par de días. Yo las tomo en cápsulas para mantener a raya a Candy, que cuando le da por rebelarse...

¡Incluso la han catalogado como alimento en sí misma por su gran cantidad de proteinas, vitaminas,...! Es totalmente inofensiva. Y solo tiene beneficios.

Si la pruebas ya me contarás.

 
At 10:29, Anonymous Anónimo said...

Que quieres decir con "cuando le da por rebelarse" o "a veces me toca los cojones"?

Realmente no tiene ningun tipo de efecto secundario?

Esta alga no puede llegar a "parasitar" en nuestro cuerpo?

Habra investigar... gracias por la informcion

 
At 14:24, Blogger y tu mamá también said...

vaya con Candy...con lo buena chica que parecía...

Interesante...preguntaré en la herboristería de enfrente de mi casa...ahí hay de todo...

 
At 12:43, Blogger Troy said...

¿Donde habrás metido lo que sea que hayas metido para conocer a Candy?

(En Wikipedia viene una foto realmente asquerosa)

 
At 01:21, Blogger Mendieta Quintana said...

¿Y cómo puede sobrevivir en el intestino? ¿Sigue siendo rubia? Lo digo porque si no le da el sol, yo creo que el pelo rubio se oscurece, ¿no?
Por cierto, yo dejaría de frecuentar los antros que debes frecuentar, porque ya ves lo que pillas (que de inocente debe tener bien poco).
Besos curativos.

 

Publicar un comentario

<< Home


adopt your own virtual pet!